PAVEMENT

Chiflados y adorables, Pavement mantienen en su grado máximo el potencial lúdico del rock. Nacieron para dejar fluir expresiones se diría que inconcientes, música libre de otra atadura que no sea la que la mantiene gozosamente adherida al instinto, surrealistas canciones sin posibilidad aparente de explicación analítica. Basan su idiosincrático estilo en la sinuosa combinación de la voz y la guitarra de Steve Malkmus. Poseen una desaforada tendencia a dejar que la música les domine y no al contrario. Pavement publicaron su primer disco "Slanted and Enchanted" que les situaría en cabeza de la oleada de bandas independiente norteamericanas. La disonancia y la insolvencia son bañadas por una rara certidumbre melódica, suenan como nadie y suenan asombrosamente bien. Son, en definitiva, un paradigma de progreso en el anquilosado universo del Pop. Sencillamente, no entiendo como a estas alturas todavía hay quien no les conoce. Llegará su día, aunque para entonces sean ya una pieza de museo.