El número 23 y Alfred Hitchcock

He visto la película el numero 23, pero no vengo hacer una crítica de la película, sino a comentar lo mucho que me ha recordado a una película de Hitchcock, pero no os equivoquéis, no lo digo porque sea buena o por ser una historia de suspense que engancha de principio a fin sino por como pueden influir los productores en una película. No es un secreto que muchos productores cambiaban las películas de hitchcock incluso al extremo de rodarle finales alternativos, como es el caso de Falso culpable, esa inolvidable película de Henry Fonda en la que es acusado de un asesinato que no cometió. Pues resulta que los productores decidieron que un final con Henry Fonda loco en un psiquiátrico no sería atractivo para el gran publico por lo que decidieron ampliar el final en el cual el protagonista se curaba de sus problemas psicológicos y volvía a ser feliz con su familia. Esto es precisamente lo que me resulto bastante similar al terminar de ver el número 23. En esta película Jim Carrey interpreta a un psicótico personaje obsesionado con el número 23 pero resulta que cuando parece que todo va acabar y llegar a un final bastante interesante, Jim Carrey decide apartarse de la calzada, evitar su muerte, curarse porque sí de su obsesión y ser feliz con su familia solo porque eso es lo que quiere ver el gran público en detrimento del buen cine.

Como puede ser que más de 50 años después sigan pasando las mismas cosas, increíble, pero bueno si te fijas en la ficha técnica, el número 23 está dirigida por un productor, por el mayor productor y dueño de Hollywood, Jerry Bruckheimer, normal que sigan pasando esas cosas.

Trailer El número 23

Fragmento de Falso Culpable